Historia de la Hermandad - Las Fusiones

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HERMANDAD DE NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES.                                                                 

Pocos datos existen del origen de esta Hermandad y su Capilla, situada en la nave de la Epístola, lado derecho, mirándolo de frente, del altar mayor de la Iglesia Parroquial de San Bartolomé.

Se conoce esta Capilla, desde tiempo inmemorial, como la de Nuestra Señora de los Dolores o de La Piedad, por el grupo escultórico que la ha presidido hasta el año de 1.951, que por acuerdo de la Hermandad Sacramental, fue cedido dicho altar y capilla, a la Hermandad de Santa Marta, siendo trasladado dicho grupo escultórico de la Piedad o Nuestra Señora de los Dolores, a expensas de dicha Hermandad de Santa Marta, al altar de la Capilla del Sagrario, colocándolo en su retablo.

En acta de Cabildo General de la Hermandad Sacramental, de fecha 11 de Marzo de 1.789 (folio 164), nos dice: "Habiéndose hecho presente por dicho Alcalde Antiguo, que D. Ignacio de Armenta, canónigo que fue de la S.I. Catedral, había dejado la fundación de un Septenario Doloroso, misa cantada todos los viernes del año, costeo del Jubileo Circular, para lo que dejaba la dotación de casas en que vivía en calle de la Rosa y otras accesorias contiguas, las cuales fincas eran suyas propias y nombraba por administradora perpetua a la Hermandad Sacramental, con el beneficio de las décimas para sus urgencias. En cuya inteligencia, se acordó aceptar dicha fundación.".

Igualmente, el folio 166, en acta del Cabildo celebrado el 24 de Febrero de 1.788, se hace constar, que se había tomado posesión de la anterior fundación y de las casas que se mencionaban.

En 1.694, en fecha 24 de Julio, existe la donación de una corona de plata, dorada por fuera y por dentro, para la cabeza de Nuestra Señora de los Dolores.

En las claverías de 1.825 y siguientes, figuran las partidas de donativos y administración de dicha Capilla.

Ya en el año de 1.951, tenemos la autorización del Emno. y Rvdmo. Sr. Cardenal Arzobispo de Sevilla, por decreto de 5 de Enero, para que como propietaria de dicha Capilla, la cedamos a la Hermandad de Santa Marta, para la instalación de sus Sagradas Imágenes al culto y el uso de dicha Capilla.

Al ausentarse de esta Parroquia la citada Hermandad de Santa Marta, los derechos de propiedad de dicha Capilla, vuelven a la Hermandad Sacramental, ya que su cesión fue para el culto y uso de la citada Hermandad.